domingo, 28 de septiembre de 2008

Quien tiene confianza no se pierde...

Dices que sólo escribo del desierto, de las arenas y tienes razón hablo mucho de ellas...hoy también.
La película Bab Aziz el sabio sufí de Nacer Khemir nos cuenta la historia de un anciano que, acompañado de su nieta sobrevive a una tormenta de arena, en medio del desierto anda sin saber su destino, se dirige a una reunión de sufíes que se celebra en un lugar desconocido cada cierto tiempo. Ninguno de ellos sabe donde es, se dejan llevar por el corazón para llegar, cada uno debe encontrar su camino en el desierto...
Hay un momento de la película...
Nieta: te vas a perder bab aziz...
Bab Aziz: quien tiene confianza nos e pierde angelito mío.
Nieta: ¿cómo llegaremos?
Bab Aziz: Quien está en paz consigo mismo no se desvía del camino, angelito mío.
Para abandonar algo que amas hay que tener fe...
Sólo decirte que en esta etapa, en este preciso instante en el que te preparas para entrar en las arenas, no tengas miedo, ten confianza en ti misma, coraje y valor para enfrentarte con tus miedos, paciencia para no desesperar, busca la paz en tu interior, es ésa la que hará posible que encuentres y no pierdas el camino.
Tienes un gran corazón y una poderosa mente, supedita siempre la segunda al primero...alguien me dijo en cierta ocasión, cuando me iba para el desierto: abre tu mente y corre con el corazón...lo hice...me ayudé de cada uno de los seres amados para dar el siguiente paso...cuando desfallezcas recuerda, mira en tu interior y allí encontrarás la fuerza del amor de los que estamos a tu lado y lo estaremos siempre, sólo tienes que dar el siguiente paso, sólo se trata de eso...paso a paso no te desvíes de tu propio camino.
Te quiero y no olvides nunca que te llevo siempre en el corazón y en la mente...

martes, 23 de septiembre de 2008

Bajo la lluvia de otoño...


La lluvia cae mansamente, salgo de la protección del edificio y la siento en la cara, miro al cielo, cierro los ojos, conecto el gps y echo a trotar...
Enfilo una larga recta de eucaliptus, son grandes y hermosos, me protegen del agua, la filtran, la aromatizan para lanzármela a la cara. Piso sus semillas, crujen, siembran de amarillo los charcos. El otoño ha entrado. El ritmo es cómodo, muy cómodo, voy disfrutando de la sinfonía de olores; la tierra, agradecida por el agua, regala su aroma sin esperar nada a cambio, simplemente sucede y allí estoy yo para poder disfrutar de ese tesoro, de esa gran maravilla que es el todo en el que me muevo.
Mi mente se disocia de donde estoy por un momento, aparece el vacío anticipado por la marcha cercana. Estos días ando haciendo una pesada digestión, mi mente y mi corazón se baten en un duelo que, de antemano, no tiene ganador. Como las estaciones pasamos por distintas etapas en la vida, una a una nos van llegando, si es que tenemos la dicha de poder vivirlas, cuando llega la hora de decir adiós a alguien amado, aunque sea temporalmente, la mente racionaliza y el corazón siente el adiós; intento que mis emociones fluyan sin interferirlas, simplemente son, simplemente están como las gotas de agua que caen en mi cara.
Sed felices o, al menos, intentadlo...

miércoles, 17 de septiembre de 2008

La Ira del justo

Todos tenemos dentro de nosotros la fuente roja de la Ira, algunos nunca llegarán a saber como no dejarse dominar por ella. Muchos intentan ser buenas personas, hacen todo tipo de cosas, siguen todo tipo de ritos para intentar ser buenos, si sanear el interior...es como pintar una casa de madera cuando ésta está podrida...
Hay otros sin embargo que no se esfuerzan, sólo son, se dejan llevar por la sabiduría peremne, esa que no tiene tiempo ni lugar, religión o mandatarios...esa que es patrimonio de la humanidad, de la verdadera humanidad que reside en cada uno de nosotros.

La ira del justo se convierte en autoafirmación, en firmeza, en rebeldía contra la injusticia...



Sucedió en Marbella, la semana pasada...



Una familia llega a la playa, los tres niños juegan en la arena, pocas personas se doran al sol. Alrededor de sus padres nos niños pequeños se sienten seguros.

Llega a la playa una señora con su perro, lo suelta...los niños se sienten amedrentados por el perro, Manuel, el padre, los tranquiliza: "aunque no esté bien que esté suelto pero no tengáis miedo, si lo suelta es que no pasa nada les dice".

Pasa un hombre negro vendiendo ropa, el perro se le avalanza...es curioso pues no no la hecho con nadie más.

Pasa un segundo vendedor negro, el perro se le echa encima, el hombre cae, y la ropa con la que se gana la vida se llena de arena. Manuel se ha dado cuenta de que la "señora" ha azuzado al perro, esta vez ha ratificado su sospecha; el vendedor increpa a la señora, le pide que agarre el perro y que no puede estar suelto en la playa, la "señora" le responde:



-Tú negro de mierda si que debes estar atado, vete de aquí que no haces más que mirar el culo a la gente...y otras lindezas...



La ira del Justo...

Manuel se levanta y se dirige a la dueña del perro le dice que la va a denunciar por racismo, tiene dos opciones o quedarse y ser denunciada o largarse inmediatamente...La niña mayor de Manuel llora ante la escena, su padre la llama y le dice:

-B. dile a esta señora quien esta persona (señalando al vendedor)

-Es un señor que viene de lejos a trabajar...

¿Ve señora?, esta niña de 10 años tiene más educación que usted...

Manuel llama por telefono, la policía viene en camino...la "señora" desmonta y se va...



Hay momentos en los que uno debe reafirmarse en sus valores, sobre todo si nuestros hijos observan y aprenden.

Esta historia real me la contó mi amigo ELHIELO, él la protagonizó, como veís escojo muy bien a mis amigos y hermanos...hay personas con las que uno iría al mismísimo infierno...sonrío al escribir esto, pues ya estuvimos juntos en él, lo que ocurre es que lo que para algunos es el Infierno para unos pocos es el Cielo...

Este post está dedicado a mi amigo y hermano Manuel Elhielo (lo que único que tiene de helado es el apodo) hombre bueno, cabal y con dos c...

Gracias Manuel por la historia, por ser como eres, por tu amistad; con padres como tú que enseñan a sus hijos lo verdaremente importante, el ser humano tiene asegurado su permanencia en la luminosidad...

Sed felices o al menos intentadlo...

miércoles, 10 de septiembre de 2008

Tres hermanos...




Vivimos en un mundo donde nada es permanente, todo está en movimiento y en proceso de cambio contínuo; en ocasiones nos tocan vivir momentos de intensa emoción, momentos en los que la piel se convierte en corazón. Tiempos que se graban a fuego en la mente y en el corazón.


Durante muchos meses he compartido ilusiones con mis hermanos, desde el día en el que comenzó nuestra aventura hasta el que acabó. Son gente noble, sin doblez. Siempre los tuve en alta estima, por eso y no por otra razón los elegí para acompañarme en la que ha sido la aventura de nuestras vidas.


Hemos vivido intensamente esta experiencia, cada uno a su manera, cada uno a su estilo. Los he visto felices surcando las arenas y su felicidad ha sido la mía.


He tenido la esperanza de que mis hermanos me volvieran a acompañar en la aventura de Sables 2.010, pero esta esperanza se ha diluido como me temía.


En estos momentos en los que mi mente recuerda los instante que he vivido junto a mis hermanos recuerdo...

Buenos compañeros, buenas personas...hermanos del desierto; el desierto es, para mí, una de las metáforas vivas más grandes que he conocido; lo pequeño, lo mínusculo representado por el grano de arena, la inmensidad, el aparente vacío. El desierto hermana a lo hombres y mujeres que lo pisan, los une de por vida.
Durante una semana fuimos una familia, durante una vida, mientras nuestras mentes recuerden y nuestros corazones sientan, seremos hermanos. siempre recordaremos que, un día, el sol y las estrellas fueron nuestro techo y que encontramos nuestros límtes en algún remoto lugar del desierto del Sahara.







Diego


Juan

He encontrado este dicho bereber, creo que expresa perfectamente, lo que siento...

"un día en el desierto, creí ver un animal, al aproximarse vi que era un hombre, al aproximarse más, vi que era mi hermano"

salam aleikum hermanos larga vida y muchas aventuras...

Sed feliceso al menos, intentadlo...

jueves, 4 de septiembre de 2008

Sobre cimas, montañas y valles...


Estamos destinados a caminar, recorrer lugares desconocidos. El ser humano está en contínuo movimiento, aunque crea que está, quieto su interior se mueve sin cesar. Durante una vida, paseará su mirada por distintos lugares, pisará cimas y valles, en ocasiones sin conciencia de ello.
El proceso vital de llegar a Ser es inagotable, incluso en las etapas más avanzadas, en la vejez lúcida, se recorren caminos de aprendizaje y, hasta el último aliento, la vida, la experiencia del Ser, se retroalimenta a sí misma.
Una vez se llega a una de las cimas, de las cumbres desde las que se domina el valle, las cosas pueden llegar a cambiar; hasta ese entonces la cumbre era el objetivo, a partir de ese momento cada instante de los que llevan a la siguiente es un fin en sí mismo, es el desembarco del cielo en la tierra.
La autorrealización es un proceso en contínua mutación plagada de momentos de goce en las que sentimos que estamos harmonía, equilibrio con nuestro entorno; más allá de los condicionamientos culturales que nos dicen lo que está bien o mal, sabemos que estamos en el camino adecuado. No todo son cumbres, otras veces nos toca subir a lomas y colinas que, sin ser tan altas y majestuosas nos hacen sentir la fuerza creadora de la vida.
Toda elevación lleva añadida la depresión, un valle es eso, una depresión en el terreno, el momento del dolor, del daño que nos acompaña a todos es vivido de otra manera por aquel que se autorealiza de forma sana; es ocasión de aprendizaje, no en el sentido de saber más cosas, tener más información sobre algo en concreto sino en el sentido de la sabiduría, esa otra forma de conocer que nos libera más que nos ata, que nos eleva y nos conduce al siguiente paso, humilde paso que, sumados uno a uno, nos llevará indefectiblemente a nuestro origen y fin.
Sed felices o, al menos, intentadlo.

martes, 2 de septiembre de 2008

Vuelta...

foto: Imanol Manterola
Como cada uno de Septiembre tengo la sensación de que hoy es el primer día del año. El verano da sus últimos coletazos, ha sido un buen verano. Ahora toca reencontrarse con lo cotidiano, con eso que algunos odian y que, en mi caso, me hace sentir igualmente bien. Para mí las vacaciones, el tiempo de cambio de hábitos es bien recibido, durante un mes aproximadamente, cambio mis hábitos: más playa, más sol, más lectura si cabe, olvidarme del reloj, conocer algún sitio nuevo.
Este mes de agosto he entrenado muy poco, como estaba previsto, mis músculos están recuperados, ya he empezado a entrenar, hay que perder los kilos de más que se han acumulado.
He hecho un lista de las cosas que tengo pendientes, son unas cuantas, son muchas las actividades que llevo por delante, no me estresan en absoluto, la clave está en hacer lo que quieres hacer y hacerlo de tal manera que no se conviertan en una carga. Cada cosa encuentra su sitio, si es que lo tiene que encontrar. Cada momento se llena, ese vacío que se llena de una forma natural y que sin buscarlo se encuentra, que sin desearlo se obtiene. Ya lo decía el bueno de San Francisco de Asís, gran Iluminado donde los haya y que casi es convertido en tea humana por su forma de ser y de estar: "deseo poco, pero lo poco que deseo, lo deseo poco". Genial ¿no?.
Este mes es un mes de entrada y salida, el equipo SABLES 2.008 se despide y nace el SABLES 2.010, con su larga andadura por delante que nos llevará, Insh Allá ( si Dios lo permite), a las arenas de nuevo.
Sed felices o, al menos, intentadlo.