Triple final...

El tiempo pasa muy rápido cuando esperas algo. Como si de arena en las manos se tratara se nos escapa sin apenas darnos cuenta.

Me doy cuenta de que todo lo que había que hacer, o casi todo, está hecho; ha sido un año y medio muy exigente, estoy contento, muy satisfecho; mi cuerpo ha aguantado bien y mi mente no se ha quedado atrás. He tenido duras pruebas que superar y, una a una, las he ido afrontando de la mejor manera posible. Las pruebas menores como las medias, los 101 de Ronda, la subida al Veleta, el maratón de Sevilla...y un montón de tiradas largas y duras. El balance no puede ser más positivo. Pase lo que pase en Sables ha merecido la pena, me lo he pasado muy bien, es más me lo sigo pasando bien. No estoy nervioso, observo como van sucediendo las cosas y me siento bien de estar haciendo esto.

La triple tirada...

El viernes salí a hacer cuatro horas con equipo, la mochila pesó 7,9 con agua, fué un entreno bueno, controlando la técnica de carrera y concentrado.

El sábado tocaba doble tirada; salí de mi casa a las 17 y algo. El plan era econtrarme con el clan sevillano en las dunas, yo haría mis segundas cuatro horas y ellos dos o tres.

Los veo, hablo con ellos y sigo adelante, quedamos en el sitio donde vamos a dormir, el viento está arreciando. Se echa la noche y la última parte del entreno la hago en la oscuridad, no enciendo el frontal hasta que ya no se veía un pimiento, me lo paso muy bien, me encanta la noche en carrera, es especial...

Llego al vivac, me llaman que vienen de camino, que me espere para cenar...vienen andando por el sendero que significa una media hora. Mientras tanto apago el frontal y me quedo a oscuras, el viento en las sapinas, la arena silbando, las estrellas en el cielo, el castillo de sancti petri al fondo... me quedo en silencio, mi mente se apaga...y abrigado y mirando al cielo, me siento feliz.

Llegan los Sevillanos y no doy crédito, traen provisiones...cerveza cruzcampo fesquita, surtido de ibéricos, pan...nos ponemos a comer y preparamos un menú degustación de distintos liofilizados; me lo paso genial con esta gente.

Miedo me da la que se puede formar en el desierto...

Después de las cervezas sacan algo que no puedo despreciar...una botella de Ron Legendario, nos encajamos un cubata y nos metemos en el saco.

Cuando amanece desayunamos y nos vamos andando hasta el coche, una vez allí, cada uno hace su entreno; ya nos nos veremos más hasta el día 27 en Madrid.

Ha sido un buen fin de semana; esta semana es de trabajo suave, al menos los primeros días, ahora queda mantener y recuperar. El último mes ha sido fuerte.

En Sables los andaluces, a propuesta del clan sevillano, vamos a hacer la fiesta de la manzanilla en la haima, el primer día de aclimatación nos beberemos unas botellitas de manzanilla (tocaremos a un vasito no os preocupéis :) ).

La verdad es que somos ultras de jamón, queso y cruzcampo que le vamos a hacer...nadie es perfecto...ni se pretende.

Ya sabéis sed felices o, al menos, intentadlo...

15 días